Charmin Michelle voz, Toni Solà saxo tenor, Gerard Nieto piano, Ignasi González contrabajo, Esteve Pi batería.
Junto con Billy Holiday y Sara Vaughan, Ella Fitzgerald —conocida también como Lady Ella— fue una de las vocalistas esenciales de la historia del jazz. Reina del scat, debutó en 1934 en Harlem y, desde entonces y hasta su muerte, en 1996, fue toda una celebridad de la música afroamericana, que interpretaba como nadie el repertorio de Duke Ellington, Cole Porter, Johny Mercer e incluso George Gershwin. Una voz poderosa, inigualable, que sedujo a Count Basie, Louis Jordan, Oscar Peterson, Joe Pass, Dizzy Gillespie y Ray Brown. Ellington dijo de ella: «Está más allá de cualquier categoría». Fitzgerald es, pues, una cantante del todo vigente, homenajeada hoy por la también estadounidense Charmine Michele, que ha recorrido medio mundo en compañía de Mulgrew Miller, Harry Allen, Grant Stewart o Jack McDuff. Michele es sin duda la intérprete más acreditada para tributar a «The First Lady of Song». Y más si lo hace en compañía del cuarteto de Toni Solà.
Charmin Michelle voz, Toni Solà saxo tenor, Gerard Nieto piano, Ignasi González contrabajo, Esteve Pi batería.
