De la misma manera que Ella Fitzgerald y Thelonious Monk, Dizzy Gillespie nació en 1917 y eso significa que este año tenemos también motivos para recordar los 100 años de su nacimiento. Abanderado de la revolución del bebop al lado de Charlie Parker, figura carismática y extrovertida como pocas, Gillespie ha sido uno de los nombres más consagrados de la era moderna del jazz. La mejor manera de mantener vivo su recuerdo es a través de su música y, en este sentido, el trompetista David Pastor es el mejor exponente del jazz hispano que puede rendirle un tributo a su espíritu. Con este propósito ha vertebrado un quinteto excepcional alrededor de la obra y figura del gran Dizzy.  

David Pastor trompeta, Gabriel Amargant saxo alto, Francesc Capella piano, Tom Warburton contrabajo, Gonzalo del Val batería.